La miel de abeja es uno de los productos más valiosos que la naturaleza pone a nuestra disposición: es un alimento muy completo por su alto valor nutritivo (cuenta con más de 10 minerales) y sirve como remedio para diversas enfermedades.
¿Por qué es mejor la miel que el azúcar?
La miel es obtenida mediante un proceso natural que las abejas realizan: extraen néctar de las flores y luego lo concentran y transforman en una sustancia natural rica en elementos nutritivos; en cambio el azúcar es un producto refinado y desmineralizado que ha perdido todas sus propiedades alimenticias.
Asimismo la miel cuenta con muchas otras ventajas:
Es uno de los alimentos más energéticos que se conocen ya que es de rápida asimilación y muy recomendada en casos donde se requiera energía inmediata.
No irrita las paredes del estómago.
No es fermentable y se digiere rápidamente.
No causa trabajo a los riñones.
La revista Weekly World New de Canadá (Enero 1995 ed. 17) cita a las siguientes enfermedades que pueden ser curadas o atenuadas, entre muchas otras, con la miel:
Enfermedades cardíacas.
Picaduras de insectos.
Infección en los riñones.
Dolor de dientes.
Resfriados y dolor de garganta.
Mejora de la digestión.
Pérdida de peso.
En el caso de bebés se puede agregar un poco de miel a la leche que toman, ya sea materna o de fórmula, para asegurar la provisión de todos los minerales necesarios, en especial de hierro y calcio.
Cabe mencionar que la miel de color más oscuro es superior en valor nutritivo a la de color claro, pues cuanto más oscura es la miel, mayor es su porcentaje de sales minerales y por lo tanto más nutritiva.
Siempre que puedas sustituye el uso de azúcar refinada por miel de abeja para tener una mayor energía y nutrición ¡sin tantas calorías!
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