A pesar de ser normalmente vilipendiado, el café es una sustancia que ha probado ser beneficiosa para nuestro organismo en más de una ocasión. En relación con enfermedades mentales, diabetes, cáncer y hasta para alargar la vida, esta ambigua bebida se ha mostrado como una alternativa interesante.
En esta ocasión nos metemos dentro del terreno cardiovascular, para hablar esta vez sobre los efectos del café sobre el sistema cardiovascular basándonos en los resultados de una investigación de la Univerisdad de Harvard liderada por el Dr. Rob M. Van Dam.
Van Dam, investigando los hábitos de consumo de 83000 mujeres que promediaban los 55 años entre el período 1980-2004, logró apreciar que el café puede ser un agente preventor de ataques cardíacos y además es presupuesto de un correcto funcionamiento del sistema cardiovascular mientras se consuma en cantidades adecuadas.
De hecho, se comprobó que el consumo de café puede disminuir hasta un 12% el riesgo de ataques cardíacos en mujeres. Sin embargo, elementos como el consumo de tabaco pueden alterar estos efectos del café, causando la anulación de sus beneficios.
A pesar de que el café y los cigarrillos suelen asociarse (pregúntenle a Jim Jarmusch sino), es preferible disociarlos y aprovechar los beneficios del café, una bebida que además de ser disfrutable puede hacernos mucho bien en cantidades adecuadas.
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