El síndrome premenstrual puede aparecer un par de veces al año o estar presente todos los meses, en cualquiera de los casos es útil conocer distintas formas de lidiar con el.
Hacer ejercicio entre tres y cinco veces a la semana, comer en horarios fijos, reducir la sal en los alimentos, agregar carbohidratos complejos a la dieta, disminuir el azúcar, beber menos alcohol y café, y aprender a relajarse son las indicaciones generales para aliviar el síndrome premenstrual. Pero existen otras más.
Los anti-inflamatorios no esteroideos como el ibuprofeno y los diuréticos, son medicamentos que pueden usarse para aliviar los síntomas del síndrome premenstrual. Aunque en la mayoría de los casos son de venta libre, no está de más controlar su consumo y consultar un médico cuando las molestias persisten.
Consumir 1000 miligramos de calcio, a través de la dieta regular o con la ayuda de un suplemento alimenticio puede aliviar el síndrome premenstrual, tanto los físicos como los psicológicos.
Tomar 400 miligramos diarios de magnesio al día puede ayudar a reducir la retención de líquidos y la sensibilidad en los senos. La vitamina B-6 en cantidades diarias de 50 a 100 miligramos puede aliviar también. La vitamina E, si se consumen 400 unidades internacionales al día, ayuda con los calambres/cólicos y la sensibilidad en los senos.
Además de hacer uso de estas medidas es recomendable que hagas un registro, mes a mes, de la evolución de tus síntomas. Puede ser útil si hay cambios importantes, porque en ese caso tendrás que consultar con tu médico y darle tantos detalles como te sea posible.
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