La importancia de la nutrición

A través del tiempo la ciencia se ha encargado de demostrar la importancia de la nutrición para el buen funcionamiento del cuerpo humano. La gran variedad de alimentos que existen nos proveen de todos los elementos que necesitamos para mantener la vida de una manera saludable

Al igual que un automóvil necesita de gasolina para funcionar o un teléfono móvil requiere que sea cargada su batería, nuestro cuerpo también consume energía todo el tiempo. Esta energía la tomamos de los alimentos. La principal fuente de energía proviene de los carbohidratos.

Muchos alimentos contienen carbohidratos y cuando hay un exceso de carbohidratos nuestro organismo se encarga de guardar esa energía sobrante en forma de grasas. Cuando hay una demanda no satisfecha de energía, nuestro cuerpo quema la grasa para obtenerla. Las grasas son como un stock de energía que está disponible para épocas de escasez.


Pero no solo de carbohidratos vive nuestro cuerpo, también necesitamos aminoácidos para reconstruir y reparar diversas partes del cuerpo y proteínas que tienen un papel protagónico en el buen funcionamiento del sistema inmunológico, nervioso, hormonal y de los órganos.

Otras sustancias que son muy importantes para una buena nutrición, además de las proteínas, carbohidratos y aminoácidos, son las vitaminas. Pequeñas cantidades de vitaminas son necesarias para el correcto funcionamiento químico del cuerpo. Muchos de los mecanismos funcionales de nuestro cuerpo se dan gracias a complejos procesos químicos y las vitaminas participan activamente en estos procesos.

Muchas veces nuestro cuerpo también es capaz de fabricar los elementos que necesita por si mismo y tiene muchas formas de contrarrestar una insuficiencia de algunos de los nutrientes, pero esto puede derivar en problemas de salud. Por eso es tan importante una buena nutrición para tener una buena salud.

El concepto de nutrición es muy complejo y ha sido ampliamente estudiado por la ciencia. Es importantísimo para llevar una vida saludable y hay que tener muy en cuenta que una alimentación saludable puede cambiar según el individuo. Cada persona tiene requerimientos nutricionales únicos.