Hoy en día existen muchos centros de belleza y estética donde podemos hacernos una mascarilla purificante. Elimina las toxinas de nuestra piel al mismo tiempo que la limpia otorgándole una apariencia más suave y atractiva.
Algunas marcas de cosméticos fabrican diversos tipos de mascarillas para usar en casa; algunas son para eliminar manchas y puntos negros, otras para embellecer la piel, para solucionar problemas de acné o como exfoliante y humectante.
Todas son efectivas y realmente que algunas tienen resultados sorprendentes, aunque a veces no están al alcance de todos ya que pueden llegar a ser muy costosas en algunos casos.
Pero eso no tiene porque ser un impedimento para poder gozar de los efectos de una mascarilla purificante ya que podemos prepararla en casa con ingredientes conocidos que no son tan costosos.
Mascarilla de algas azules
Esta preparación es especial para devolver la elasticidad a la piel. Es altamente purificante y rejuvenecedora por su aporte de minerales.
Podemos conseguir las algas azules en polvo llamada espirulina en tiendas especializadas y solo hay que mezclar una o dos cucharadas con agua tibia o con gel neutro. Masajear el rostro durante tres minutos y dejar actuar otros diez minutos. Limpiar con abundante agua fría.
Tomate
El tomate puede limpiar los puntos negros de la cara si cortamos unas rodajas y frotamos bien la parte a tratar. Dejar actuar unos cinco minutos y lavar con agua, se puede repetir todas las veces que se quiera.
Mascarilla embellecedora
Se prepara con media taza de zumo de pepino, una clara de huevo y una cucharada de leche en polvo. Mezclar hasta conseguir una crema espesa y aplicar en el cuello y rostro con movimientos circulares. Dejar actuar unos veinte minutos y remover con agua tibia. Esta mascarilla tiene un efecto tonificante y nutre la piel dejándola mas tersa y suave.
Estas son sólo algunas de las recetas caseras para preparar una mascarilla, existen muchísimas más.
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